En Latinoamérica, los casos de violencia de género y femicidios se han convertido en un tema constante, especialmente en Venezuela, donde se vio un inusitado crecimiento de muertes de mujeres de manera violenta, o casos que resultaron ser turbios.
Por nombrar dos casos que en 2020 se hicieron noticia en el país, podemos nombrar el de Morella León, quien tras 31 años en cautiverio a manos de quien fue su novio, Matías Salazar, en Maracay, estado Aragua, en el centro del país. Esto ocurrió a finales de enero.
Ella estuvo sometida todo ese tiempo a malos tratos y una alimentación nada adecuada, que le arruinó la salud por completo. Sin embargo, al escuchar en la radio (lo único que podía escuchar en su cautiverio, además de ver TV nacional, lo que hizo que no perdiera la noción del tiempo), supo de la existencia del Instituto de la Mujer, sitio al que fue cuando escapó, pero en el lugar, no la atendieron como es debido porque consideraron que Morella estaba loca o era indigente.
Otra trabajadora sí puso atención e hizo que fuera al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), y ahí se logró que detuvieran a su captor, quien estaba denunciando por la desaparición de la dama. Ahí fue donde se descubrió todo.
El otro caso sonado fue el asesinato de Karla Ríos, a manos de su ex pareja, Edward Chacón, quien la maltrató al punto de romperle documentos personales, incluso un pasaporte con visa.
Ríos lo había denunciado por violencia y logró que el Cicpc le impusiera una orden de restricción, pero de nada sirvió porque a finales de julio, Chacón la asesinó de dos disparos. Sigue prófugo por lo que se sabe. Las leyes venezolanas no contemplan que alguien pueda ser arrestado por agresiones físicas, y ahí es donde el sistema falló por completo.
Previo al asesinato, Chacón le envió un video a la víctima afirmando que se suicidaría si no volvía con él, porque ella decidió romper la relación de cinco años que tuvieron por esos maltratos. El sujeto tenía un arma en el metraje.
En los dos casos podemos notar un patrón: la poca disposición que hay en entes que puedan ayudar a prevenir estos casos, y por ello las víctimas no se animan a denunciar porque creen que no conseguirán la ayuda que necesitan.
Sin estadísticas ni ayuda
Ronald Ron, funcionario policial y experto en materias de seguridad, explicó que actualmente, ningún ente lleva estadísticas de agresiones de género, como pasa con los robos, hurtos, homicidios y otros crímenes. Esto es algo que no permite ver la dimensión del problema del país y es una propuesta permanente de Ron en mesas de trabajo con distintos cuerpos de seguridad.
También narró que existe una falta de atención de funcionarios con respecto al tema y estos no suelen actuar ante esos casos. "Si tomamos a una modelo cualquiera, para que finja haber sido agredida y acuda a denunciar el caso a un cuerpo de seguridad, lo más probable es que esa actriz diga que en esas dependencias le manifestaron que ' esas no son sus funciones', o no les toca atenderlas".
"Entonces pasa lo que ya he visto muchas veces. Se empieza con un golpe aquí, otro allá. Luego la escalada violenta sube y sube hasta que ocurre un feminicidio", lamentó, al tiempo que dijo que este tipo de violencia no se queda nada más allí y trasciende a niños, niñas y adolescentes como población muy vulnerable.
Añadió que este tipo de cosas son las que desaniman a las víctimas a formular una denuncia.
El experto en temas de seguridad expuso que los cuerpos de seguridad deben actuar con prontitud en esos casos. "Si una víctima denuncia a un agresor, los funcionarios de la ley deben detenerlo de inmediato, porque si este ve que fue denunciado y no ha sido capturado, podría tomar represalias. Es algo que sucede mucho".
En esta clase de temas, también debe estar muy pendiente el Ministerio de la Mujer, que según sus objetivos, debe velar por los derechos de las féminas.
Cursos de defensa
Ron suele hacer cursos instructivos para agentes policiales y militares, pero cinco veces al año, imparte sus conocimientos en defensa personal a civiles, especialmente mujeres.
El especialista dijo que este tipo de eventos lo hace con presencia del Ministerio de la Mujer y la terapeuta Noraide de Ron.
En esos cursos, enseñan a las damas a identificar potenciales peligros, a reconocer si están siendo seguidas y otros detalles que pueden aplicar en su día a día, no solamente en casos de agresiones. Con estas iniciativas, se busca que las mujeres tengan confianza y desarrollen capacidades y también se busca que las autoridades actúen en casos de violencia de género para contrarrestarlos y la convivencia sea mejor.
Juan Afonso