Gaza se levantó este jueves tras una larga noche de intensos bombardeos, con la población recluida en sus casas ante los ataques de represalia israelíes, entre cientos de inmuebles destruidos o dañados y escombros que se amontonan con el intercambio de fuego entre las milicias palestinas e Israel, que ha causado ya 83 muertos.
En la peor escalada de violencia en siete años, la ruina entre las calles del enclave comienza a recordar cada vez más a las imágenes de las anteriores guerras de 2008, 2012 y 2014, los últimos conflictos de gran dimensión con Israel que extendieron destrucción en la franja.
Con la vía pública casi vacía de tráfico y peatones y la mayoría de los dos millones de habitantes encerrados en casa ante bombardeos de los que no se pueden proteger con refugios antiaéreos, cientos de personas salieron para enterrar varios milicianos de las Brigadas Al Qasam -ala militar de Hamás- muertos en recientes ataques israelíes.
Desde que estalló el pasado lunes, el actual repunte de violencia se ha saldado con la muerte de 83 palestinos, de los cuales unos 16 murieron en las últimas horas. Entre el total de fallecidos hay 17 niños y 7 mujeres y los heridos rozan el medio millar (un total de 487).
En Israel siete personas han muerto por el disparo de cohetes de las milicias de los grupos islamistas Hamás y Yihad Islámica, entre ellos dos menores.
En Gaza los bombardeos israelíes han destrozado cinco edificios altos -algunos de hasta 14 plantas, donde en su mayoría, según el Ejército, había oficinas o se usaban para actividades de Hamás.
En las últimas horas, aviones de combate atacaron un edificio en el barrio de Rimal, en el centro de Gaza, y otro inmueble de una decena de plantas que albergaba las oficinas del Banco Nacional Islámico. Según el Ejército, este es la principal entidad bancaria de la organización.
Hasta el momento, los ataques han dejado también 350 viviendas del enclave "destruidas o dañadas", y cientos más han sufrido "daños moderados", según datos de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) en los territorios palestinos.
Según concreta en un informe publicado hoy, "muchas familias han sido desplazadas" y 1.750 personas se han visto afectadas por ello.
Siete fábricas, ocho escuelas y un centro sanitario resultaron también dañados. A ello se suman "decenas de posiciones militares" o "instalaciones policiales y de seguridad", entre las que OCHA destaca la destrucción del cuartel general de Policía en Gaza.
Ataques
El Ejército israelí respondió con más de 600 ataques contra objetivos militares del enclave, bajo férreo bloqueo desde 2007.
Las milicias islamistas de Hamás y la Yihad Islámica lanzaron 1.600 cohetes desde la Franja de Gaza hacia Israel desde el inicio de la escalada, de los que el 90% fueron interceptados por el sistema antimisiles Cúpula de Hierro, informó hoy el Ejército.
Los cohetes dejaron siete muertos en Israel, entre ellas una adolescente y un niño, mientras que los palestinos muertos en Gaza en la actual escalada de violencia ascendieron hoy a 83, entre ellos 17 niños y 6 mujeres.
Además, un total de 388 civiles palestinos resultaron también heridos, entre ellos 115 menores, concretó la misma fuente.
Del total de proyectiles lanzados desde el lunes a las 3:00 GMT, incluidos los de esta noche, 400 fueron fallidos y cayeron en la misma franja. A su vez, las fuerzas armadas atacaron más de 600 objetivos del enclave, según concretaron hoy en un comunicado.
EFE
