Joe Biden, candidado demócrata para presidente de Estados Unidos, consiguió la victoria en las pasadas elecciones del 3 de noviembre, en las que el resultado se supo tras cuatro días de incertidumbre por algunos estados donde no se había terminado de contar votos.
Biden le llevaba 50 puntos de ventaja a Donald Trump, ex candidato republicado y actual presidente norteamericano. El sábado pasado el demócrata fue elegido como ganador de la contienda. En paralelo, Trump acusó fraude electoral y llevará el asunto a instancias judiciales, cosa que ya autorizó el Secretario de Justicia, William Barr, quien ordenó la investigación.
El recién electo presidente no la tendrá fácil. El congreso, de mayoría republicana, aún no le reconocen como ganador, y Biden tendrá que trabajar con ellos después de asumir el 20 de enero de 2021.
Además, el demócrata tendrá dos retos que él mismo anunció: combatir la crisis del coronavirus en el país, que lleva casi 240 mil muertos y los casos se dispararon considerablemente en los últimos días, e intentar unificar a una dividida nación, que se encuentra polarizada, algo que se vio mucho en estas elecciones.
Sobre la pandemia, Biden prometió mejorar el acceso a las pruebas y seguir las indicaciones de los especialistas y asesores de salud, algo totalmente contrario a la gestión de Trump, quien tuvo muchos encontronazos con ese sector.
El discurso de Biden fue de tono conciliador, incluso dirigió palabras a los simpatizantes de Trump como parte de sus palabras y promesas de unificación de la ciudadanía norteamericana.
