Un policía que estuvo en la dantesca escena del camión en San Antonio de Texas lleno de migrantes reveló, a medios locales, que muchos de los 51 fallecidos habían sido rociados con especies o condimentos para carne para evitar ser detectados en los puestos fronterizos.
Sobre este revelador descubrimiento, el exagente de Seguridad Nacional, Timothy Tubbs, aseguró al diario San Antonio Express que los traficantes de personas utilizan con frecuencia especias para que los perros no detecten a los seres humanos.
“Los perros están entrenados para varias cosas. Algunos para oler el dinero, otros para oler narcóticos, armas y otros más para oler seres humanos”, dijo.
Hasta la fecha, se contabilizan 51 fallecidos, inicialmente se habló de 42 muertos pero varios de los sobrevivientes han fallecido en los hospitales de San Antonio donde fueron trasladados debido al delicado cuadro de salud que presentan.
Al respecto, el jefe de bomberos de San Antonio, Charles Hood, relató que los sobrevivientes no tenían agua y estaban demasiado débiles para salir del camión por su cuenta a a pesar de tener la puerta abierta.
“Se supone que no debemos abrir un camión y ver montones de cuerpos allí. Ninguno de nosotros viene a trabajar imaginando eso”, dijo.
Sobre la condición de los 13 sobrevivientes que hay hasta el momento, el arzobispo de la arquidiócesis de San Antonio pudo hablar con varios de ellos y relató que muchos de ellos aún están intubados.
“Los heridos están en condición crítica, con fallas neurológicas, renales y hepáticas y con hemorragias internas”, señaló.
Sobre el conductor del camión se sabe que responde al nombre de Homero Zamorano, de 45 años, y fue detenido en un campo cercano después de que supuestamente abandonara el camión de 18 ruedas con decenas de migrantes escondidos.
“Estaba muy drogado con metanfetamina cuando lo arrestaron y tuvo que ser llevado al hospital”, dijo un oficial de la ley a medios locales.
Fuente: cnnee
