Cinco de los líderes de las protestas prodemocráticas en Tailandia comparecieron este lunes en comisaría para ser informados de una acusación de lesa majestad, que acarrea penas de hasta 15 años de cárcel por criticar a la familia real.
El abogado Anon Nampa y los líderes estudiantiles Panupong 'Mike' Jadnok, Parit 'Penguin' Chiwarak y Panusaya 'Rung' Sithijirawattanakul defendieron la libertad de expresión a su llegada a la comisaría en Bangkok.
Los activistas prodemocráticos elevaron tres dedos, el gesto de la saga de "Los juegos del hambre" que se ha convertido en símbolo de las protestas, y luego se los llevaron a la boca para criticar la censura.
Al menos doce cabecillas de las manifestaciones antigubernamentales han sido acusados de vulnerar el artículo 112, también conocido como la ley de lesa majestad, por las peticiones de reforma de la monarquía y criticar al rey Vajiralongkorn.
La comparecencia en comisaría se produce al día siguiente de que miles de manifestantes protestaran frente a los barracones del 11 Regimiento de Infantería en la capital.
Se trata de un lugar simbólico, ya que es una de las unidades militares que pasaron el año pasado al control personal del monarca, al que los manifestantes acusan de atesorar más poder del que le permite la Constitución.
Esta ola de protestas, que comenzó en julio, se dirige contra el primer ministro, Prayut Cha-ocha, al que piden la dimisión, al tiempo que también exigen una nueva Constitución para limitar el poder de los militares, que han tomado el poder en 13 golpes de Estado desde 1932.
La reforma de la monarquía es la demanda más audaz de los manifestantes y la que ha creado más fricciones con los sectores más conservadores de Tailandia.
Las manifestaciones desafían directamente a la casa real con mensajes explícitos que hasta hace unos meses eran tabú y prácticamente impensable escucharlos en público.
Vajiralongkorn, de 68 años y que ascendió al trono en 2016, despierta menos respeto que su difunto padre, el venerado Bhumibol Adulyadej, y sus largas estancias en Alemania son criticadas por los estudiantes.
El monarca, que se encuentra en Tailandia desde mediados de octubre, ha tomado también control personal de la fortuna real, valorada en al menos 35.000 millones de dólares (unos 29.000 millones de euros) y que está prácticamente exenta de pagar impuestos.