El gobierno francés restableció por decreto este miércoles el estado de emergencia sanitaria, que entrará en vigor a partir del 17 de octubre a la medianoche en toda la nación. La medida tiene como objetivo frenar la nueva ola de contagios de COVID-19 que ha tenido lugar durante las últimas semanas en el país.
“En vista de su propagación por el territorio nacional, la epidemia de COVID-19 constituye un desastre sanitario que, por su naturaleza y gravedad, pone en peligro la salud de la población. Justifica la declaración de un estado de emergencia sanitaria para que se puedan tomar medidas estrictamente proporcionales a los riesgos para la salud y adecuadas a las circunstancias de tiempo y lugar”, reza el acta de la reunión del gobierno.
Este régimen proporciona un marco jurídico para tomar ciertas restricciones como el confinamiento nacional que se declaró a inicios de 2020.
El presidente Emmanuel Macron tiene previsto tomar la palabra a las 19:55 durante una entrevista televisada en la que podría anunciar nuevas restricciones.
Entre las medidas que se barajan y que Macron podría anunciar está un “toque de queda” nocturno, con importantes restricciones, que podría imponerse desde las 21:00 hasta las 6:00 en varias ciudades como París, Marsella, Lyon, Montpellier, Lille y Toulouse, a partir de este fin de semana.
La comparecencia de Macron en televisión nacional y en horario de máxima audiencia busca llamar la atención de la población ante el progresivo empeoramiento de la situación sanitaria por culpa de la pandemia, que ha causado casi 33.000 muertos en el país y amenaza con colapsar las unidades de cuidados intensivos de varias zonas hospitalarias, incluyendo París y su región.
