Donald Trump afirmó este lunes que el gobierno estadounidense ha ofrecido a China y al presidente Xi Jinping “cualquier ayuda que sea necesaria” para contener el coronavirus, que continúa expandiéndose con rapidez en China y hacia otros países.
“Estamos en muy cercana comunicación con China con respecto al virus”, escribió el presidente en su cuenta de Twitter. Si bien dijo que los casos reportados en suelo norteamericano son “muy pocos”, enfatizó que están en estricta vigilancia.
Sobre la oferta de asistencia a las autoridades chinas, que ya comenzaron a desarrollar una vacuna, destacó la capacidad de los investigadores estadounidenses: “¡Nuestros expertos son extraordinarios!”, dijo.
Esta nueva cepa ya ha contaminado a más de 2.000 personas y causado en torno a 80 muertos.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) revisó a “alto” este lunes el riesgo del coronavirus surgido en China.
China confía en derrotar al virus. “Mientras tengamos una confianza firme, trabajemos juntos -prevención científica y tratamientos- con políticas precisas, seremos, con seguridad, capaces de ganar la batalla”, dijo Xi, que lo calificó de “situación grave”.
Pero el virus se expande y ya está presente en cuatro continentes. Europa registró sus primeros tres casos el viernes, en tres personas que viven en Francia y que habían estado recientemente en Wuhan, epicentro del nuevo coronavirus, de la familia del SRAS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo), que en 2002-2003 mató a 774 personas en todo el mundo.
