Más de 50 clérigos, incluidos 48 sacerdotes, en una diócesis de Michigan han sido acusados de abuso sexual que se remonta a la década de 1950, según un inquietante informe del principal fiscal del estado.
La oficina de la fiscal general del estado, Dana Nessel, emitió el informe como parte de una investigación de cinco años sobre el abuso sexual del clero dentro de las diócesis católicas del estado de los Grandes Lagos.
En total, la investigación encontró que 48 sacerdotes, tres hermanos religiosos, un ex hermano religioso y cuatro diáconos presuntamente participaron en conducta sexual inapropiada en la Diócesis de Lansing durante las últimas siete décadas.
De estos, 11 casos de abusos cometidos por clérigos católicos dieron lugar a la presentación de cargos y nueve resultaron en condenas como resultado de la investigación estatal. Dos casos involucraban a sacerdotes y a un hermano religioso de la diócesis de Lansing, según el Detroit News.
Vincent DeLorenzo, un exsacerdote, fue sentenciado a un año de prisión y cinco años de libertad condicional en junio de 2023 por intento de agresión sexual criminal en primer grado contra un niño de 5 años, a quien presuntamente abusó después de un funeral familiar. Murió en prisión en enero, según los documentos.
Timothy Crowley, otro sacerdote que sirvió con DeLorenzo, recibió una sentencia de un año de cárcel y cinco años de libertad condicional en noviembre de 2023 por conducta sexual delictiva en segundo grado. Anteriormente se declaró culpable de abuso sexual de una menor después de su primera acusación en 1993, informó Detriot News.
Joseph Comperchio, un maestro de escuela católica y músico de iglesia que se presentó como hermano religioso, fue sentenciado en agosto de 2021 a hasta 30 años de prisión por abusar sexualmente de cuatro niños. Murió en prisión en 2022.
Este informe es sólo uno de los siete que Nessel ha prometido publicar para cada diócesis católica de Michigan. Los informes de las diócesis de Marquette, Gaylord y Kalamazoo ya se han hecho públicos.
“Estos informes son importantes, no sólo porque hicimos una promesa a los sobrevivientes hace años, sino porque las víctimas, especialmente en casos como estos donde las agresiones fueron perpetradas por miembros de confianza de una comunidad, a menudo son silenciadas, en algunos casos durante décadas o toda la vida”, dijo Nessel en un comunicado.
“Al publicar estos informes, compartimos sus historias y validamos sus experiencias. Esperamos que este informe dé voz a quienes han sufrido en silencio durante tanto tiempo”.
El obispo Earl Boyea, quien ha dirigido la Diócesis de Lansing desde 2008, se disculpó y condenó las acciones de los sacerdotes enfermos.
“Después de leer este largo y detallado informe, mi corazón se rompe por todos aquellos que han sufrido debido al mal del abuso sexual clerical, que es una gran traición a Jesucristo, Su Santa Iglesia, el sacerdocio y, lo más grave, a aquellas víctimas -y sus familias- que fueron dañadas física, emocionalmente, pero sobre todo espiritualmente cuando eran tan jóvenes”, dijo en un comunicado .
“A todos aquellos que han sido heridos por acciones tan criminales e inmorales les digo claramente y sin vacilar: estas cosas terribles nunca debieron haberles sucedido; lamento profundamente que hayan sucedido; tengan la seguridad de mis oraciones, penitencia, amor y apoyo”.
Se espera que todos los informes restantes estén terminados en 2026.
Traducción de NY Post
