Cinco años después de que un devastador incendio arrasara la catedral de Notre Dame de París, los turistas están ansiosos por volver a ver uno de los monumentos más antiguos y simbólicos de la ciudad, esperando su reapertura a finales de año.
Casi inmediatamente después del incendio se lanzó un esfuerzo a gran escala para restaurar la grandeza de la famosa catedral.
"Fue muy intenso y cuando cayó la aguja se nos saltaron las lágrimas y se puede ver que todavía me emociona. Como nací en París, como mi marido, y tenemos recuerdos de la infancia de este lugar, así que fue difícil", dice Josy Touchard, residente de la capital francesa.
El presidente del país, Emmanuel Macron, se comprometió a reconstruir la catedral a la que llamó "una parte de nosotros" y pidió ayuda para hacerlo.
Cinco años después, los tribunales siguen buscando respuestas. Se están realizando nuevos peritajes, incluido un segundo análisis de todos los precintos.
"Se pueden realizar nuevos análisis utilizando nuevos procedimientos, ya que la ciencia evoluciona constantemente. Y quizás las nuevas investigaciones aporten nuevos elementos", afirma Serge Delhaye, experto forense en incendios.
Los investigadores descartaron la posibilidad de que se tratara de un crimen. Los 15 trabajadores interrogados han quedado absueltos de cualquier delito.
Según funcionarios franceses, la reconstrucción de la catedral de Notre Dame avanza lo suficientemente rápido como para permitir su reapertura prevista el próximo 8 de diciembre.
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