La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) abrió este martes sus puertas a dos nuevos aliados nórdicos, Suecia y Finlandia, aunque el fin exitoso del proceso dependerá de Turquía, que aguarda el cumplimiento de acuerdos para levantar su veto.
En una ceremonia reservada, los embajadores de los países de la OTAN dieron inicio formalmente al proceso de ratificación de la adhesión de suecos y finlandeses, con la firma de los protocolos en la sede de la alianza, en Bruselas.
"Es un buen día para Suecia y Finlandia, y un buen día para la OTAN", dijo el secretario general de la poderosa alianza militar transtlántica, Jens Stoltenberg.
El funcionario añadió que la firma de los protocolos "marca el inicio del proceso de ratificación" de los pedidos de adhesión.
El ingreso de Suecia y Finlandia -dos países que mantenían una política de asociación con la alianza- representa un evidente fortalecimiento estratégico de la OTAN en la región del Ártico, en un cuadro de agravamiento de tensiones con Rusia.
Sin embargo, todo el proceso de adhesión de suecos y finlandeses se encuentra bajo una espesa nube de incertidumbre por la postura de Turquía, que amenaza con ejercer su derecho al veto.
Fuente: Diario Las Américas