La Plaza de San Pedro y la Basílica de San Pedro se cerraron a los turistas y grupos guiados debido al coronavirus, pero miembros individuales de la fe podrán ingresar a la basílica a rezar, informó el Vaticano este martes. En el comunicado también se confirmó que la oficina de correos en la plaza también permanecerá cerrada, así como su librería y el servicio de fotografía.
Las autoridades del pequeño estado amurallado también ordenaron la suspensión de las actividades en la cafetería dentro del Vaticano que funciona para los empleados. Todas las medidas estarán vigentes hasta el 3 de abril. La Santa Sede ya clausuró los Museos Vaticanos, que permanecerán cerrados, como todos los centros culturales italianos, hasta comienzos del mes próximo.
Italia es el segundo país más afectado por la pandemia del coronavirus. Hoy, la cifra de decesos reportados alcanzó los 631 sobre un total de 10.149 casos confirmados de enfermos, según los últimos datos proporcionados por el jefe de la Protección Civil, Angelo Borrelli. Los casos positivos actuales son ya de 8.514 y 1.004 personas ya se han curado.
Esta medida entra en vigor este martes y significa que los fieles y los turistas no podrán reunirse el miércoles en la plaza de San Pedro para la tradicional audiencia del papa, que será retransmitida por video. Al mismo tiempo, el papa Francisco pidió a los sacerdotes que “tengan el valor de salir e ir a visitar” a los enfermos afectados por el nuevo coronavirus, durante la misa matinal en su residencia, la casa Santa Marta.
