Tras un período de tres años en lista de espera, se ha autorizado la eutanasia a una mujer holandesa de 29 años. La muerte asistida se llevará a cabo en las próximas semanas, desencadenando un debate polémico en toda Europa, según lo informado por The Guardian.
El caso de Zoraya ter Beek, quien padece depresión crónica, ansiedad, trauma y un trastorno de personalidad no especificado, ha sido ampliamente difundido por el periódico británico. Recientemente, también le fue diagnosticado autismo.
A pesar de someterse a tratamientos intensivos, que incluyeron terapias de conversación, medicación y más de 30 sesiones de terapia electroconvulsiva, no ha logrado encontrar alivio a sus problemas y ha perdido la esperanza.
Aunque al encontrar pareja creyó que su situación mejoraría, se dio cuenta de que su sufrimiento persistía. Zoraya menciona haber continuado autolesionándose y sintiéndose suicida.
A pesar de considerar la posibilidad de quitarse la vida, el suicidio de un compañero de su centro escolar y su impacto en la familia de este la disuadieron. Fue en 2020 cuando inició el proceso para solicitar la eutanasia. En los Países Bajos, la muerte asistida por un sufrimiento mental insoportable ha sido permitida desde 2002 en casos donde no existen perspectivas de mejora.
Por otro lado, Zoraya ter Beek destaca la rigurosidad de las normativas y la seguridad del proceso de eutanasia en su país. La mujer afirma no haber tenido dudas en su decisión durante los tres años y medio de trámite.
A medida que se acerca el día designado, explica que el equipo médico se trasladará a su domicilio, donde recibirá un sedante antes de la administración de los medicamentos que detendrán su corazón, induciendo un estado de coma.
Aunque el sentimiento de culpa persiste, Zoraya se muestra decidida y preparada para este paso, encontrando cierta paz en su decisión. Su declaración refleja una profunda reflexión sobre el amor y la necesidad de dejar ir a quienes se aprecian en situaciones difíciles.
Tania Simosa (pasante)
