Improvisaciones peligrosas con bombonas de gas se hacen frecuentes por falta de gasolina

Dos explosiones se registraron en el estado Anzoátegui, Venezuela, sin dejar víctimas fatales

Las crisis suelen poner creativas a las personas para poder superar una carencia. Ha sucedido mucho en los últimos años en Venezuela ante el colapso socialista: cambios en la forma de alimentarse, vestirse, en rutinas y otras cosas.

Pero ahora hay una modalidad bastante peligrosa respecto a esta escasez: conductores que improvisaron sus motores para que en vez de gasolina, usen gas de uso natural.

El país ha visto en 2020 cómo una nueva crisis de combustible ha vuelto a aparecer, pero esta vez, el asunto se alargó tras la llegada de la pandemia del COVID-19 a la nación. Venezuela está prácticamente paralizada por la falta de gasolina.

Esto provocó que el transporte dejara de movilizarse -sumado a las restricciones de la cuarentena-, imposibilitó que el personal esencial pueda trasladarse, los alimentos tampoco han podido distribuirse de manera tradicional, entre otras cosas.

Ante esta nueva improvisación, las consecuencias podrían ser letales. Solamente en el estado Anzoátegui, al noreste del país, se registraron dos explosiones. Una de ellas fue el domingo 3 de mayo en la ciudad de Puerto La Cruz, justo en una estación de servicio.

El estallido dejó dos heridos; los ocupantes de un Toyota Starlet, y una buseta que quedó afectada por la onda expansiva. El resto de la gasolinera, por suerte, no sufrió daños.

El lunes 4 del mes corriente, en Barcelona, otro vehículo estalló por la misma práctica. No hubo heridos en este incidente.

Debido a los dos casos, autoridades municipales ahora centran esfuerzos en inspeccionar los vehículos circulantes. En Lechería, el alcalde Manuel Ferreira inició las revisiones de los carros que pasan por esa ciudad.

En El Tigre, al sur de Anzoátegui, tres conductores fueron sancionados por esto. La policía municipal les aplicó dos artículos de la Ley de Tránsito Terrestre. Uno de ellos, el 169, prohíbe la modificación de las partes de los vehículos sin los permisos correspondientes puesto que pone en peligro a otras personas.

Por su parte usuarios aseguran que no han podido surtir sus vehículos de manera efectiva en las estaciones de servicio de la ciudad de Puerto La Cruz.

Se sabe que muy pocos carros en el país, pueden usar el gas como combustible. La mayoría no están hechos para recibirlo. Un ejemplo del tipo de automóvil que los usa, son las unidades Yutong que llevan años circulando en Venezuela.

Estas adaptaciones representan un peligro porque los conductores tratan de alterar los esquemas originales de  los vehículos a la fuerza, y a la larga, ocurren accidentes. Aquellos carros que pueden trabajar con gas natural ya vienen de fábrica dispuestos para usarlo

 

Juan Afonso

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