Alcalde de Nueva York desvela los detalles de la fase 1 de la reapertura

Aún no tienen una fecha específica para la desescalada pero se espera que sea dentro de dos semanas

El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, desveló este jueves los planes de la ciudad para entrar en la primera fase de reapertura, algo que reiteró podría suceder en una o dos semanas, momento en el que se calcula que entre 200.000 y 400.000 trabajadores volverán a sus puestos.

"Lo han hecho tan bien que estamos en una posición de hablar sobre empezar a abrir, paso a paso, fase por fase", dijo De Blasio en su rueda de prensa diaria, en la que señaló que el inicio de la vuelta a la normalidad sucederá "muy, muy pronto".

El alcalde dijo que aún no se tiene una fecha específica para el arranque de la fase 1, aunque insistió en que probablemente será en la primera o segunda semana de junio "si los números se mantienen y siguen progresando".

Según los últimos datos de las autoridades de la ciudad, el porcentaje de población infectada por el coronavirus ha descendido hasta un 6% pese a que el número de pruebas que se hacen sigue "aumentando diariamente", que en la actualidad se encuentra en 20.000 al día.

Así, De Blasio explicó que en la fase 1 podrán volver a la actividad los negocios no esenciales dedicados a la construcción, manufactura y venta al por menor.

En este último grupo, la venta sin embargo se limitará a recogidas de las mercancías por parte de los clientes tanto dentro como fuera de los establecimientos "para que sea una transacción rápida y de contacto limitado", explicó.

En cada negocio, los empleados deben llevar las caras cubiertas y permanecer a por lo menos 2 metros de distancia en todo momento, mientras que la ocupación de los establecimientos debe estar por debajo del 50 por ciento, y los espacios reducidos, como los ascensores o los puesto de caja, deben estar limitados a una sola persona.

Asimismo, las compañías deben limitar las reuniones todo lo posible y proveer a sus empleados con materiales de protección, así como permitir el trabajo a distancia en medida de lo posible.

Las autoridades requerirán además la limpieza y desinfección frecuente de cualquier espacio compartido por parte de las empresas, así como cuestionarios de salud a sus empleados y revisiones de su temperatura corporal.

El alcalde aseguró que serán varios los departamentos de la ciudad que ayudarán a los negocios a solucionar cualquier duda sobre la apertura, como el del Consumidor, el de la Protección del Trabajador y el de los Servicios a los Pequeños Negocios.

Por otra parte, tanto del Departamento de Bomberos como el Departamento de Sanidad de Nueva York irán revisando los negocios para asegurarse que se cumplen con las medidas impuestas, y podrán decretar el cierre de un establecimiento en caso contrario.

Si aun así permanece abierto, apuntó De Blasio, los dueños se enfrentarán a una multa de 1.000 dólares al día.

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